Devocional diario

Consistente y confiable

“Cuando se sintió el hambre en toda la tierra de Egipto, el pueblo clamó a Faraón por pan. Y dijo Faraón a todos los egipcios: Id a José, y haced lo que él os dijere. Y el hambre estaba por toda la extensión del país. Entonces abrió José todo granero donde había, y vendía a los egipcios; porque había crecido el hambre en la tierra de Egipto. Y de toda la tierra venían a Egipto para comprar de José, porque por toda la tierra había crecido el hambre” (Génesis 41:55-57).

Lecturas adicionales: Hechos 6:3; Josué 1:5; Génesis 6:9; Hechos 10:22; Lucas 2:25-26; Génesis 39:2-6

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En el pasaje vemos algunas marcas del liderazgo de José:
1. Tenía un plan: “reunió todo el alimento de los siete años de abundancia”.
2. Era disciplinado para cumplir el plan: “guardó alimento en las ciudades, poniendo en cada ciudad el alimento del campo de sus alrededores”.
3. Tenía autoridad y credibilidad, porque estableció graneros en todo Egipto. Lo que significa que él no hizo solo todo el trabajo, pues este plan se llevó a cabo en toda la tierra de Egipto.
4. Delegó trabajo y se hizo lo que él había planeado y ordenado.
5. No se olvidó de la visión ni de confiar en la Palabra de Dios: “Y comenzaron a venir los siete años del hambre, como José había dicho y hubo hambre en todos los países, mas en toda la tierra de Egipto había pan”.
6. Estaba preparado para el tiempo de la crisis: “mas en toda la tierra de Egipto había pan”.
7. Sus líderes tenían toda la confianza en él: “Id a José, y haced lo que él os dijere”.
8. Tuvo éxito en su empresa: “y vendía a los egipcios... Y de toda la tierra venían a Egipto para comprar de José”.
9. La razón del éxito de José la encontramos en Génesis 41:38-39: “¿Acaso hallaremos a otro hombre como éste, en quien esté el espíritu de Dios? Y dijo Faraón a José: Pues que Dios te ha hecho saber todo esto, no hay entendido ni sabio como tú.”

Mi oración hoy es que seamos personas en las que otros puedan confiar. Que nuestras vidas den testimonio de ser personas confiables y llenas del Espíritu Santo para seguir los planes y la voluntad de Dios.