Devocional diario

Los dioses ajenos

“Dijo Dios a Jacob: Levántate y sube a Bet-el, y quédate allí; y haz allí un altar al Dios que te apareció cuando huías de tu hermano Esaú. Entonces Jacob dijo a su familia y a todos los que con él estaban: Quitad los dioses ajenos que hay entre vosotros, y limpiaos, y mudad vuestros vestidos. Y levantémonos, y subamos a Bet-el; y haré allí altar al Dios que me respondió en el día de mi angustia, y ha estado conmigo en el camino que he andado.” (Génesis 35:1-3).

Lecturas adicionales: Josué 24:23; Deuteronomio 4:24; Romanos 16:27; Judas 1:4; Salmos 135:15-18

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Dios le pide a Jacob que vaya a Betel. Jacob obedece, pero toma una medida drástica para él y su familia: “Quitad los dioses ajenos que hay entre vosotros, y limpiaos...” ¿Por qué Jacob pidió que su familia y los que con él estaban se despojaran de sus “dioses ajenos” para poder estar en la presencia del Dios verdadero?

1. Porque hay un solo Dios. Los “dioses ajenos” no existen. Son la construcción de culturas, de mentes finitas: “Porque hay un solo Dios...” (1 Timoteo 2:5), “el único Dios verdadero” (Juan 17:3),
2. Porque Dios no está dispuesto a compartir lo que Él es con nadie: “porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso” (Éxodo 20:5b), “Porque no te has de inclinar a ningún otro dios, pues
Jehová, cuyo nombre es Celoso, Dios celoso es” (Éxodo 34:14).
3. Porque es el primer mandamiento de Dios, de donde se desprenden los demás mandamientos: “Yo soy Jehová tu Dios... No tendrás dioses ajenos delante de mí” (Éxodo 20:2-3).
4. Porque tener “dioses ajenos” conduce a la muerte. ¡Muerte eterna!: “El que ofreciere sacrificio a dioses excepto solamente a Jehová, será muerto” (Éxodo 22:20). ¿Qué es un “dios ajeno”? Cualquier persona, cosa, asunto, idea, filosofía, enfoque que tome el lugar que Dios debe tener en la vida: Cristo debe ser el número uno en la vida: “Cristo... fue el primero en resucitar, para ocupar el primer lugar en todo” (Colosenses 1:18, Versión Biblia para todos), “para ser en todo el primero” (Nueva Versión Internacional). “a fin de que Él tenga en todo la primacía” (Biblia de las Américas).

Oro hoy para que examinemos nuestro corazón para ver si hay “dioses ajenos” en nuestra vida y nos despojemos de ellos.