Devocional diario

¡Tengo los pelos de punta!

“Acuérdate del día de reposo para santificarlo. Seis días trabajarás, y harás toda tu obra; mas el séptimo día es reposo para Jehová tu Dios; no hagas en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu bestia, ni tu extranjero que está dentro de tus puertas” (Éxodo 20:8-10).

Lecturas adicionales: Isaías 56; 58:13-14; Juan 14:21-24; Hebreos 10:25.

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Separemos un día para el Señor, ¡no nos olvidemos: “Acuérdate del día de reposo para santificarlo” (v. 8); “mas el séptimo día es reposo para Jehová tu Dios; no hagas en él obra alguna...” (v. 10).

Dios nos dice que en seis días por semana podremos hacer todo lo necesario: ¿Somos mayordomos de nuestro tiempo?: “Seis días trabajarás, y harás toda tu obra” (v. 9).
Este mandamiento no es solo para mí. Yo soy también responsable por mi familia y todos aquellos que estén bajo mi jurisdicción: “... tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu bestia, ni tu extranjero que está dentro de tus puertas” (v. 10).

Dios ya nos ha dado el ejemplo. Él no nos pide nada que no esté dispuesto a cumplir personalmente: “Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, el mar, y todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto, Jehová bendijo el día de reposo y lo santificó” (v. 11).

Jesús dijo: “No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir. Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido. De manera que cualquiera que quebrante uno de estos mandamientos muy pequeños, y así enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los cielos; mas cualquiera que los haga y los enseñe, éste será llamado grande en el reino de los cielos. Porque os digo que si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos” (Mateo 5:17-20).

Hoy oro para que guardemos el día de reposo. Es una orden. Obedezcamos todos los mandamientos.